miércoles, 25 de junio de 2014

27- Todo tiene una primera vez (parte 2)

Para que quede claro, si, lo hicimos. Y me siento genial. Sin embargo, no es que haya amanecido de la mejor manera.

Estaba durmiendo... Si, en ropa interior. Niall igual lo hacía a mi lado. En un momento, Dai, suponiendo que estábamos despiertos (y con ropa), entró a la habitación tan de repente que nos despertamos de golpe y nos sentamos en la cama. Niall había vuelto a cambiarse, tenía los calzones puestos. Yo, en cambio, no me cambié porque estaba muy agotada por lo que estaba... desnuda. La situación fue así: Dai abrió la puerta, nos despertamos, se tapó los ojos y volvió a cerrar la puerta. Me puse de pié y me puse la ropa de muy mal humor. Dai me vio al salir y me pregunto tímida

-¿Que paso allá?

-Dai... Ya lo sabrás...

-Oohhh... Eso... -dijo y me dió un abrazo, luego gritó- MI AMIGA YA NO ES VIRGEN!!

Le tapé la boca y le susurré

-Calla, imbecil.

-Uy bueno... ¿Pero porqué no...?

-Amiga, todo a su tiempo... Por favor ni una sola palabra.

-Ok, no diré nada a los chicos, pero... A las chicas si.

-NO.

-Entonces lo harás tu ahora.

Me empujó hacia la puerta de la habitación que Lucy y Louis compartían. Allí estaban Pauline, Lucy, Stevie y Giuliana, no estaba Louis porque fue a alquilar una película para la noche.

-Chicas, emm...

-JENNIFER NO ES VIRGEN DESDE AYER!!! -gritó Dai-

-¡¡Que te calles, imbecil!! -

-Es enserio? -pregunta Giuliana-

-Muy en serio -poco a poco se me fue yendo el mal humor-. Anoche.

-Ouch. -dijo Lucy- Eso lo complica todo.

-¿Qué?

-Emm... Hemos averiguado que... Tienes un admirador secreto. Lo supimos porque te llegaban cartas al buzón y no las agarraba nadie, por eso nos dio curiosidad y las leimos. 

-Sabéis que leer cartas ajenas es ilegal ¿no? Bueno, no importa. -extendí la mano- Ahora entréguenlas.

Las cartas eran firmadas todas por un tal AS. Había una de ese mismo día, sin abrir. La abrí y la leí.

"Hay veces que me impresionas con lo inteligente que eres, además de bella. Un día respondiste la ENORME ecuación de la maestra Fromm en menos de cinco minutos. Ahora me gustaría que sepas quien soy. No será difícil y es probable que ya a este punto lo sepas. Por otro lado, el otro día te escuché cantar en la hora de música y te tengo que decir que tienes la voz de un angel. Por favor, trabaja en eso, que harás felices a miles de oídos y a miles de corazones. Y en esto quiero que sepas que te apoyaré. Recuerda que si caes debes ponerte de pie. No lo olvides. NUNCA DIGAS NUNCA."

Estas ultimas palabras estaban escritas con un marcador indeleble de un violeta raramente familiar. Esto parece haberse tatuado en mi corazon.

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Black Moustache